lunes, 21 de junio de 2010

MASACRE, SALVAJISMO Y UN HASTA AKI!! LOS MAREROS DEBEN MORIR!!!

En El Salvador no se roba por necesidad

 21 DE JUNIO DE 2010 01:28 | por Marvin Aguilar
Esta semana el científico que ayudó a resolver el problema de la viruela, Frank Fenner, anunciaba que la raza humana se extinguirá en el transcurso de los próximos cien años, debido a dos causas –entre otras- principales: la sobrepoblación, y el consumo que está fuera de control. Cerraba la pagina web de Il corriere della sera y, revisé por última vez el Diario La Página. Con profundo dolor descubrí en qué clase de país nos estamos convirtiendo: en uno malo. En nuestra nación leí, las pandillas y las mentes enfermas que los organizan ya han comenzado su incendio.

Señor presidente: ¿o somos un país con problemas o, un país problema?

¿Tendremos los salvadoreños que comenzar a matar pandilleros? Siendo honesto yo no culparía a nadie que comience una cacería de anti sociales. Lamento haber tenido que escribir las líneas anteriores, estoy, lo comprendo, igualándome a los asesinos. Lo lamento. Pero quizás los macacos son más humanos que los salvadoreños.

Me es difícil renunciar a mi ideario liberal, pero debo considerar que el libertinaje humano de 30,000 pandilleros nos está postrando como pueblo, como nación, como Estado.

Debemos de controlar la población, no más salvadoreños que nazcan en condiciones de pobreza.

El ex presidente Bil Clinton lo señalaba acertadamente cuando sostenía: tener ahora muchos hijos, se convierte en una acción de ruptura, en una acción egoísta contra la sociedad organizada, porque introduce o puede introducir en esa sociedad organizada individuos culturalmente no controlables.

Basta desde la izquierda de acusar(a la derecha) de pretender criminalizar la pobreza, basta desde la derecha religiosa de oponerse al control de la natalidad. El Salvador es incapaz de darle trabajo a tanto brazo y sustento a tanta boca. Pero los políticos y moralistas son como la araña: tiene ocho ojos y es prácticamente ciega.

El cineasta Jorge Dalton ha realizado para el PNUD, un documental Ciudad Adentro, (que puede ser visto en cerounotv.com), en donde refleja la formas de vida de 2, 000,000 de salvadoreños que viven en las zonas de pobreza, marginalidad y, alto riesgo social.

Con semejante fractura social acabará este paisito armando una masacre entre hermanos, otra vez. El gobierno debe decirle a los guanacos que la crisis económica continuará agravándose, esto debido a que el cambio climático ocasionará que haya escasez de alimentos, nosotros solo producimos gente, que cada vez será más pobre; luego solo las personas con capacidad económica estable y solida podrán resistir las carestías que se avecinan. Lo dijo David Cameron a los británicos: hay que reconocer que el pueblo inglés ha vivido más allá de sus posibilidades. ¿Acaso a los salvadoreños antes de darles educación y salud, se les dio bienes materiales o de consumo y, por eso siempre terminan llegando un día tarde y con un dólar menos?

¿Para qué sirven el dinero de las extorsiones?

El salvadoreño nulo, escaso de creatividad, usa el dinero no para satisfacer sus necesidades básicas, sino su propensión marginal al consumo. Observaba en un supermercado, la serie de fotografías que cuelgan en una pared de ladrones que sorprendieron robando en su tienda. Nadie tenía comida, solo objetos innecesarios que una persona machista, ostentosa y agresiva necesita para demostrarse a sí mismo y ante los demás que no es un pata en el suelo.

Pues igual, secuestran y extorsionan por que confunden el buen gusto con la riqueza. En El Salvador no se roba por necesidad, se roba por la ética del egoísmo, por la mal sana idea de vivir bien a toda costa. Es estructural esto, aquí no se construyen aceras seguras, cómodas, sino que carreteras. Importan así más los carros que las personas.

Hemos pasado del asco de Castellanos Moya, al vómito constante.

Cierro con la idea que el académico de la Universidad de Australia decía en relación al exterminio del hombre: si bien es cierto que el consumismo desmedido de la humanidad nos llevará a situaciones dramáticas como las de BP en el golfo de México; que la sobrepoblación nos conduce a sociedades de dos velocidades como la salvadoreña, transformándonos en uno de los países más violentos del mundo, también es cierto que es el mismo hombre el que puede cambiar las cosas. Dios no ha puesto las cosas así, es el hombre quien es el responsable de esta caótica situación, a pues ese mismo hombre debe ser capaz, debe ser responsable de enderezar este estado de cosas.

Rezar, orar, solo es un acto de escapatoria. Acción se requiere.

En El Salvador esta pasa por controlar el nacimiento de la población, a menos que nos parezca más razonable y sano comenzar a aceitar todas nuestras armas de fuego para extirpar los cánceres sociales. Y ya todos sabemos en qué termina eso.


el autor es columnista de lapagina.com.sv21 DE JUNIO DE 2010 01:28 | por Marvin Aguilar